FASE 0 – https://youtu.be/eocSNQIK5ps
FASE 1 – https://youtu.be/A4YVoNX-FgA
FASE 2 – https://youtu.be/JAKkDDmVerY
FASE 3 – https://youtu.be/UsbFX4Wjl7w
FASE 4 – https://youtu.be/9DC3UBIhXu0
¿Vas a someterte a una cirugía de reconstrucción del ligamento cruzado anterior o ligamentoplastia? ¿Te gustaría conocer las opciones quirúrgicas, así como lo que puedes hacer durante los primeros días? Si buscas la respuesta a estas preguntas, este vídeo esta echo para ti.
Hola amigos, bienvenidos de nuevo a fisioterapia a tu alcance, soy Marcos Sacristan y hoy damos comienzo a una serie completa sobre la ligamentoplastia o reconstrucción del ligamento cruzado anterior. Analizaremos fase por fase los mejores ejercicios y recomendaciones. En este vídeo voy a explicaros las dos cirugías más comunes en la reconstrucción del ligamento cruzado anterior, así como las indicaciones para los primeros tres días tras la cirugía, sin embargo si quieres acceder al resto de fases de la rehabilitación, pincha en la esquina superior derecha de la pantalla.
Las cirugías más utilizadas hoy en día se dividen en dos. La primera de ellas se llama HTH, o hueso tendón hueso, en la que básicamente se remplaza el ligamento roto, por un injerto que se extrae del tendón rotuliano conformado por un extremo de hueso, H, un cuerpo de tendón rotuliano que corresponde a la T y un último extremo oseo, H. El injerto formado por hueso tendón hueso se injerta en la misma ubicación que el ligamento cruzado anterior lesionado y se tensa para dotar de estabilidad a la articulación. Este tipo de ligamentoplastias se usaban más hace unos años, actualmente se siguen usando, pero han dejado paso a una técnica operatoria más actual llamada STRI. Que hace referencia a las estructuras de donde se extrae el injerto, el semitendinoso y el recto interno, ambos músculos poseen un largo tendón que termina en la parte lateral interna de la rodilla.
Una vez extraído el tendón, se elabora un montaje doblándolo varias veces hasta dar un injerto de unos 7 cm, que se coloca de nuevo en la misma ubicación que el ligamento cruzado anterior lesionado.
En principio ambas técnicas son igual de buenas, en la práctica la técnica HTH suele ser menos dolorosa y más rígida, dotando de una mayor estabilidad a la rodilla, sin embargo, suelen ser más complicada a la hora de lograr una buena flexión de rodilla. La técnica STRI es más dolorosa, menos estable en las primeras etapas, y sobre todo más frágil. Sin embargo, a largo plazo ha demostrado ser más efectiva que la técnica HTH.
Según tu historia médica y tus características particulares, el cirujano elegirá la cirugía que mejor se adapte a tus necesidades.
La rehabilitación en ambos casos es muy similar, no importa que sea HTH o STRi, o cualquier otro tipo de cirugía, el protocolo que os propongo está validado para cualquier tipo de ligamentoplastia, siempre que respetéis las consignas de vuestro cirujano.
En general, la evolución del injerto intraarticular que reemplaza el ligamento cruzado anterior es lenta, muy lenta. En un primer momento el injerto será muy frágil, y habrá tomar todas las precauciones posibles para proteger la rodilla. El injerto obtendrá su resistencia inicial al cabo de 5 a 6 meses, por ello es muy recomendable que incluso si el paciente se siente bien, tengamos especial atención con el trabajo dinámico como los saltos, cambios de ritmo o la carrera. Además, a lo largo de los primeros seis meses el trabajo en cadena cinética abierta estará completamente desaconsejado.
Después de esta vista general, vamos a ver qué podemos hacer durante los primeros tres días tras la cirugía de ligamentoplastia.
Al día siguiente de la operación, caminar con muletas apoyando parcialmente la pierna está permitido, manteniendo siempre la rodilla en extensión completa gracias a una rodillera articulada, o rígida. Se recomienda la movilización suave de la rodilla, entre 0 a 30ºde flexión, en compañía de un fisioterapeuta, sin realizar apoyo alguno en el pie, deteniéndose y respetando siempre cada vez que aparezca el dolor. No es necesario buscar ni una gran flexión ni una gran extensión durante los primeros días. Únicamente inducir una movilización suave que permita el vaciado del líquido inflamatorio y el edema. La aplicación de hielo es muy recomendable, dos o tres veces al día, durante 15 minutos, dejando unas tres horas entre cada aplicación. Colocar la pierna ligeramente elevada, os ayudará a mejorar la circulación y combatir con el hematoma y el edema.
Duerme bien y come bien durante los primeros días, tu cuerpo lo necesitará.
Muy bien amigos, esto ha sido todo, respecto a las técnicas quirúrgicas y los primeros días de rehabilitación en la reconstrucción del ligamento cruzado anterior. Si quieres conocer más sobre la rehabilitación en las siguientes fases puedes pinchar en la esquina superior derecha de la pantalla.