¿Sufres dolor crónico?¿Te gustaría entender como funciona el dolor, y porque en muchas ocasiones duele a pesar de no existir una lesión?

Hoy os traigo un interesantísimo vídeo magistral sobre el dolor, que vale su peso en oro, no dudes en parar y retroceder el vídeo para entenderlo bien, ya que contiene conceptos que te costará comprender. El dolor puede ser un fenómeno complejo, lo que significa que muchos factores diferentes pueden contribuir a su aparición y perpetuación, y que esos factores pueden entrelazarse entre sí siendo muy difícil separar uno del otro, siendo muy compleja su explicación y su tratamiento.
Debemos entender el dolor como un conjunto de subsistemas anidados. ¿Anidados, te preguntaras?, significa que el sistema en su conjunto está compuesto de subsistemas más pequeños, que también están compuestos de subsistemas más pequeños y así sucesivamente. Esto que te acabo de decir puede sonarte a chino pero con el siguiente ejemplo lo verás mucho más claro.
Por ejemplo, el ser humano está compuesto por sistemas de órganos agrupados por su función, como el sistema nervioso o el sistema muscular o esquelético, estos sistemas a su vez están compuestos por órganos, como el cerebro y la médula espinal para el sistema nervioso, y los músculos y los tendones para el sistema muscular, todo ello está compuesto por células como las células nerviosas y las células musculares y así sucesivamente. Además y por si no fuera poco, las personas somos parte de sistemas más grandes como la familia, la comunidad, o la economía de un país.

En los niveles «inferiores», se puede analizar el estado de salud de las células y órganos como músculos, tendones, discos o nervios. Por ejemplo, tal vez te duela el pie debido a una fractura por estrés. Aquí es donde se pueden encontrar «problemas en los tejidos», que es donde el tratamiento tradicional del dolor ha centrado la mayor parte de su atención. A menudo esto se llama el «enfoque biomédico» o la parte «bio» del modelo biopsicosocial. Encuentras la estructura que está dañada y trabajas para repararla.
En los niveles «más altos» de análisis, como la persona o el entorno, se observan fenómenos más complejos: el papel de los pensamientos, las emociones o las relaciones sociales. Estos son los temas «psicosociales» que se sabe que tienen efectos muy importantes en el dolor crónico. Los problemas en estas áreas suelen ser relativamente sutiles, más relacionados con la desregulación o el desequilibrio que con algo que se rompe o se lesiona. Estos temas también son invisibles si se buscan en un nivel más bajo. Por ejemplo, no se puede ver la depresión evaluando un pie, es necesario hablar con una persona.
Hay muchas disciplinas formales diferentes que se pueden estudiar para obtener una mejor comprensión en cada nivel. Hay que tener en cuenta que las disciplinas son muy diferentes entre sí, y muy pocas personas tendrán un conocimiento significativo en más de un nivel.
En los niveles inferiores, podrías estudiar biomecánica, fisiología del ejercicio o neurodinámica. Cada uno de ellos te daría una mejor comprensión de cómo las estructuras físicas del cuerpo responden al estrés, ya sea rompiéndose y lesionándose, o adaptándose para hacerse más fuertes.
Podrías subir un nivel para estudiar el comportamiento de un sistema más grande como el sistema nervioso, el sistema inmunológico o el sistema endocrino. Esto te ayudaría a ver que el dolor funciona como una alarma. Los sistemas nervioso, inmunológico y endocrino ayudan a establecer la sensibilidad de la alarma, y a determinar los tipos de eventos que la hacen sonar. La «ciencia del dolor» es sobre todo educación en la fisiología básica de estos sistemas en relación con el dolor.
Podemos subir a otro nivel, a la «persona», dónde estamos estudiando el papel de las cogniciones y las emociones en el dolor. Este es el reino de la psicología, cuya relevancia debería ser obvia – el dolor es un evento psicológico.

Se podría avanzar aún más para estudiar el papel de los sistemas sociales y económicos. Muchos críticos sociales argumentan que las verdaderas patologías que causan una amplia variedad de enfermedades crónicas – incluyendo la adicción a las drogas, la ansiedad, la depresión e incluso el dolor crónico – tienen su origen más a nivel de la sociedad que del individuo. Por ejemplo, la baja condición socioeconómica es un gran predictor del dolor crónico. La mayoría de los profesionales sanitarios no se involucran en el intento de resolver problemas a este nivel, pero son muy conscientes de que tienen un gran impacto en los resultados clínicos.

Aunque cada extremo del espectro tiene sus costes y beneficios, no hay duda de que hasta hace muy poco, los fisioterapeutas han pasado demasiado tiempo en los niveles inferiores, buscando problemas en los tejidos con sus microscopios, mientras que ignoraban algunos problemas humanos muy reales y de gran envergadura sentados justo delante de ellos.