Por qué sentarse es malo para tu salud.
Fisioterapia a tu alcance.
En este momento es probable que estés sentado para ver este vídeo, y permanecer sentado unos minutos para verlo esta bien.
Pero cuanto mas tiempo estés en esa posición, mas se perturbara tu cuerpo.
Este cuenta los minutos hasta que levantas de nuevo y lo lleves a dar un paseo.
Puede que esto suene ridículo, ¿crees que a tu cuerpo le gusta estar sentado?
En realidad no. Claro que estar sentado por periodos breves puede ayudar a recuperarnos del estrés o del ejercicio.
Pero hoy en día, nuestro estilo de vida nos hace sentarnos mas de lo que nos movemos, y el cuerpo simplemente no esta pensado para una existencia tan sedentaria. De hecho, esta pensado para todo lo contrario.
El cuerpo humano esta diseñado para moverse y esto se puede comprobar fácilmente por como esta estructurado.
Tenemos mas de 360 articulaciones y unos 700 músculos esqueléticos que nos permiten movernos de manera fácil y fluida.
La estructura física del cuerpo nos da la capacidad de ponernos de pie en contra de la gravedad. La sangre depende de nuestro movimiento para circular correctamente. Por qué sentarse es malo para tu salud.
Nuestras células nerviosas se benefician del movimiento, y nuestra piel es elástica, así se amolda a nuestros movimientos.
Entonces, si cada centímetro del cuerpo esta preparado y a la espera de que te muevas, ¿que ocurre si no lo haces?
Empezamos con el mástil del cuerpo, la columna vertebral.
Nuestra columna es una larga estructura que sirve como mástil y soporta el peso corporal.
Compuesta de huesos, discos de cartílago, articulaciones, músculos y ligamentos compenetrados entre si para conservar una estructura sólida.
Una de las formas más comunes de sentarse es con la espalda curvada y los hombros caídos, una postura que presiona de forma desigual a la columna vertebral.
Con el tiempo, esta sobre presión desgasta los discos intervertebrales, sobre carga algunos ligamentos y articulaciones, y presiona a los músculos que se estiran para acomodar la posición curvada de la espalda.
Esta forma encorvada también reduce la cavidad torácica al estar sentados, por lo que tus pulmones tiene menos espacio para expandirse al respirar.
Esto es un problema, ya que limita temporalmente la cantidad de oxigeno que llena los pulmones y que filtra la sangre.
Alrededor del esqueleto hay músculos, nervios, arterias y venas, que forman las capas de tejido blando del cuerpo.
El acto mismo de sentarse, aprieta, presiona y oprime, y estos tejidos mas delicados se llevan la peor parte.
¿Alguna vez has sentido entumecimiento e hinchazón en las piernas cuando estas sentado?
En las zonas mas comprimidas, los nervios, arterias y venas pueden bloquearse, limitando las señales nerviosas, provocando una sensación de adormecimiento y reduciendo el flujo de sangre en las piernas, haciendo que se hinchen.
Sentarse durante largos periodos también puede desactivar temporalmente la liproprotenia lipasa, una enzima especial de las paredes de los capilares sanguineos que descompone las grasas en la sangre, así que cuando te sientas, no quemas la grasa tan bien como moviéndote. Por qué sentarse es malo para tu salud.
¿Y que efecto tiene todo esto en el cerebro?
La mayoría de las veces quizás te sientes para utilizar de manera intensiva tu cerebro, pero irónicamente, largos periodos sentados en realidad hacen lo contrario.
Estar sentado reduce el flujo sanguineo y la cantidad de oxigeno que entra en el torrente sanguineo hacia los pulmones,
El cerebro requiere tanto de ellos para permanecer alerta que tus niveles de concentración muy probablemente bajen conforme disminuye tu actividad cerebral.
Por desgracia, los efectos nocivos de estar sentado no solo son a corto plazo.
Estudios recientes muestran que estar sentado largos periodos de tiempo, está vinculado a algunos tipos de cáncer y a enfermedades del corazón.
Y pueden contribuir a problemas de diabetes de riñón y de hígado.
De hecho, los investigadores han calculado que, en todo el mundo, la inactividad provoca aproximadamente el 9% de las muertes prematuras al año.
Eso supone más de 5 millones de personas.
Así que lo que parece ser un hábito muy inofensivo, en realidad tiene el poder de cambiar nuestra salud.
Pero por suerte, la solución a esta amenaza es sencilla e intuitiva.
Cuando no tengas más remedio que sentarte, trata de cambiar la postura desgarbada a una columna vertebral recta, y si no tienes que estar atado al asiento,
intenta moverte mucho más.
De hecho ya que el vídeo esta a punto de terminar, ¿porque no te levantas y te estiras ahora mismo?